Si con los sentidos comunes podemos crear grandes y magnificas creaciones culinarias con los otros sentidos (el del equilibrio, la presión, la temperatura, etc..) utilizándolos de otra manera podríamos dar una nueva innovación culinaria. Un ejemplo sencillo el alcohol altera la percepción y el equilibrio tal vez se podría crear un producto culinario que altere nuestra percepción de manera sana y agradable por unos instantes.
Por lo tanto creo muy posible que con diferentes combinaciones de sentidos nuevos y viejos se podrá y se seguirán creando innovaciones culinarias como lo hace el restaurante Can Celler.
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